Enclavada en la zona norte de la colonia Roma y rodeada por emblemáticas construcciones, se encuentra la enigmática “Plaza Río de Janeiro”. Es una de las plazas más famosas de la colonia Roma en la Ciudad de México.
Su origen e historia
Inició como parte de un proyecto urbano emprendido por Porfirio Díaz, ya que su innovador diseño incluía casas y edificios con una acentuada influencia de la arquitectura francesa. Capaces de competir con cualquier orbe de Norteamérica o Europa.
Delimitada por la intersección de las calles de Durango y Orizaba, originalmente se llamó Parque Roma y fue creada en 1903. Posteriormente, cambió su nombre a Parque Orizaba.
Fue rebautizada en 1922 cómo “Plaza Río de Janeiro” por iniciativa del aquel entonces secretario de educación pública, el licenciado José Vasconcelos. Esto posiblemente fue debido a la invitación qué se le hizo a México para asistir a la conmemoración del centenario de la independencia de Brasil.
Leyendas urbanas de la Plaza Río de Janeiro
Leyendas urbanas cuentan también qué se cambió el nombre de la plaza debido al icónico edificio que lleva ese nombre, el cual se encuentra ubicado en su parte oriente. Asimismo, porqué la chamana Bárbara Guerrero habitó el inmueble. Actualmente, este majestuoso edificio es mejor conocido por el sobrenombre de “la casa de las brujas”.
La casa de las brujas
El edificio “Río de Janeiro” fue diseñado por el arquitecto e ingeniero inglés Regis A. Pigeon, creador también del edificio que lleva su nombre en la colonia Juárez y el cual es mejor conocido como “el castillo colorado”. En un principio, fue concebido cómo hotel de lujo por orden del general Porfirio Díaz para celebrar el centenario de la independencia de nuestro país y termino siendo un edificio de departamentos.
Se llevó a cabo una remodelación en 1942 a cargo del arquitecto mexicano Francisco Serrano, modificando el interior estilo “Art Déco”. Contrastando con su exterior de tabique rojo tipo inglés y su característico techo en forma de sombrero de bruja en un entorno ecléctico debido a la fusión de varios estilos arquitectónicos.
El David de Miguel Ángel
Por otra parte, se llevó a cabo en 1976 un programa de remodelación a cargo del Departamento del Distrito Federal, en donde se instaló una réplica del David de Miguel Ángel hecha de bronce en medio de la fuente circular que se encuentra al centro de la plaza. Fue un regalo donado por parte del gobierno italiano con el propósito de estrechar relaciones y cuyo original se encuentra en la ciudad de Florencia.
En torno de la plaza, se encuentran boutiques, galerías, una papelería, bares, cafeterías, cervecerías y una gran variedad de restaurantes. Un punto para resaltar es qué se encuentra a unos pasos de Casa Lamm, el edificio Balmoria y la parroquia de la Sagrada Familia.
Paseando por la Plaza Río de Janeiro
La plaza es también un lugar idóneo para sacar a pasear las mascotas, abriendo su espacio para la convivencia y así poder interrelacionarse con otras personas para formar nuevas amistades. De igual manera, es un punto de reunión de scouts y un espacio para qué los niños jueguen. Así como también para pasear o hacer ejercicio, además de contar con diversas actividades sociales, culturales y recreativas.
Desde principios del siglo XX hasta el día de hoy, se ha convertido en un punto de encuentro tanto de turistas cómo de locales. De igual forma, ha sido fuente de inspiración de poetas y escritores. Finalmente, ha sido aprovechada también por los creadores de cine y televisión que han seleccionado esta emblemática plaza como locación debido al ambiente y belleza que brinda.
Autor de foto de portada (Parque en Plaza Río de Janeiro): José V. Carreño
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