Bienvenidos a la segunda parte de “Un inmigrante italiano en México”. En esta parte conoceremos como funcionó la fábrica de sombreros, un poco sobre el gran Café Rico Moka; así como el desenlace de la vida de Mario Zumpano Albamonte.
La fábrica de un italiano muy altruista
Mario Zumpano era muy querido por mucha gente gracias a su gran espíritu altruista, no nada más con sus paisanos, también podría ser cualquier persona que así lo requiriera. Él dedicaba gran tiempo a su fábrica de sombreros que había sido instalada en su casa.
Vendía grandes cantidades en aquella época, tanto en la Ciudad de México como fuera de ella, ya que además exportaba sus sombreros a otras partes del mundo. Para el buen funcionamiento de sus máquinas, la fábrica necesitaba tanques de gas. En una ocasión un tanque cayó al suelo y explotó haciendo que los demás explotaran segundos después.
La fábrica, el inicio y el fin
Un día que parecía común como cualquier otro, la fábrica se quemó. Gracias a la llegada oportuna de los bomberos se pudo recuperar gran parte y el incendio no llegó a la casa. Rápidamente Mario levantó la fábrica y volvió a vender grandes cantidades.
Lo que más lo ponía contento era poder contratar personas que necesitaban trabajo. Así duró otros años más, hasta que sucedió de nuevo, la fábrica explotó y se repitió la historia. Mario comenzó a trabajar arduamente para volver a levantarla. La fábrica reabrió sus puertas y volvió a vender.
Autor: Ileana Zumpano
Sin embargo, llegaron épocas muy difíciles ya que las personas comenzaron a dejar de usar sombrero, a las nuevas generaciones ya no les parecía atractivo y la venta, cada vez, era menor. Mario tuvo que comenzar a despedir gente que trabajaba en la fábrica y eso lo ponía muy triste.
Cafetería Rico Moka
Después de varios intentos, llegó el fin de la Fábrica de Sombreros tipo Canotier “Italia”. Mario cayó en una depresión muy fuerte, sin embargo, su esposa y sus hijos lo animaron día a día y él un poco repuesto, decidió abrir una cafetería. Café Rico Moka (más adelante conocerás la historia de esta gran cafetería). Ubicado en las calles de Ayuntamiento y Revillagigedo, a dos cuadras de la emisora de radio XEW, muy cerca también de Televicentro hoy conocido como Televisa.
Adiós al gran tutor
Pocas veces el italiano se presentaba en el café, tenía un socio el cual era quien estaba al frente del negocio. Mario ocupaba su tiempo para visitar a sus paisanos y para escribir cartas a su familia de Italia. Especialmente al tío que hizo el papel de su tutor.
Pocos años después, el italiano Mario recibió una noticia muy triste, su tutor, había fallecido. Mario todavía no se recuperaba de la depresión por el cierre de su fábrica. Así que esto significo un golpe muy fuerte para su salud emocional.
Depresión persistente
Todos los domingos después de comer salía de su casa a caminar solo y regresaba a altas horas de la noche hundido en su depresión. Se sentía una persona inútil por no poder emplear más gente, el fallecimiento de su tutor sucedió antes de un viaje que ya tenía planeado para ir a visitarlo.
Autor: Ileana Zumpano
Su esposa e hijos hacían lo imposible para animarlo, pero él nunca se recuperó. Hasta que en un mes de julio de 1958, el inmigrante italiano Mario Zumpano Albamonte, decidió quitarse la vida con una sobredosis de barbitúricos. Uno de sus hijos lo encontró inconsciente en su cama y lo llevaron de inmediato al hospital, fue demasiado tarde, lamentablemente Mario había fallecido.
Grazie nonno per il tuo grande amore
10 años después de que mi nonno falleció, nací yo, y aunque no lo conocí, gracias a los relatos de mi papá y las fotos que siempre me ha mostrado, me siento muy cercana a él. Además de que se encargó bien de enseñar su cultura a mi padre quien a su vez me la enseñó a mi. Gracias nonno por preocuparte para que tus descendientes tuviéramos una vida mejor.
¡Gracias por acompañarnos en esta aventura!
Nunca sabemos por lo que está pasando una persona. Seamos amables siempre. Ileana Zumpano.
Autor de foto de portada: Ileana Zumpano
